Inspirado en el archiconocido templo circular (tholos) del santuario de Atenea Pronaia en Delfos, nos llega este interesante juego de ¿construcción? Pues sí pero no, porque realmente es más bien un juego de estrategia (para 2 jugadores) al nivel del ajedrez. Y no es de hecho casual, imagino, que los bandos sean precisamente el blanco y el negro, aunque también contamos con la inclusión de unas fichas grises que, sabiendo dónde colocarlas, servirán para hacerle la puñeta al oponente.

La caja contiene un tablero de juego (a doble cara), un tablero de puntuación, 42 fichas (16 blancas, 16 negras y 10 grises), 5 fichas de localización, 2 losetas de taller, 7 losetas de ornamentación, 1 marcador de cantera y, por supuesto, el reglamento.

El objetivo del juego es sencillo, conseguir el máximo posible de puntos al completar las 7 columnas (de 5 fichas de altura) del templo. El jugador con más fichas propias en cada columna será el que se lleve esos puntos, sumando 1 por cada ficha propia, 3 por cada ficha rival y restando 2 por cada ficha gris. En caso de empate nadie sumaría los puntos de dicha columna.

Pero queda lo más interesante del juego, y es que cada una de las columnas tiene una habilidad especial que solo se activa si colocas encima una ficha de tu color (puedes jugar con los tres colores). Con ello se consigue mover fichas de una columna a otra, destruirlas o, incluso, poder robárselas al rival de su taller. Esto permite una serie de múltiples posibilidades que aumentan las variantes del juego.

Además, el tablero incluye un modo de juego avanzado (al que aún no hemos jugado pues de momento nos sobra con el modo estándar). En él, gracias a las losetas de ornamentación —que no se utilizan en el juego básico—, ciertas columnas añadirán puntos extra, modificarán el conteo de las piezas grises o incluso permitirán que estas activen las propiedades de la columna. Incluso una de las losetas permite aumentar a 7 la altura de una columna. Como digo, estas reglas avanzadas añaden una mayor variedad táctica a un juego que, de por sí, ya permite muchísimas estrategias distintas.

Así queda el juego una vez completadas las sietes columnas y a la espera de empezar a contar los puntos de cada jugador.

El juego es entretenido aunque requiere de cierta concentración, pues un movimiento en falso puede afectar al resto de la partida. Con esto quiero decir que favorece, y alimenta, la competitividad. Por lo tanto no es recomendable para pasar un rato distraído con la familia (al ser solo de 2 jugadores es también bastante excluyente) sino más bien para picarse con alguien y estar echando revanchas todo el rato. Las partidas son relativamente rápidas, de entre 15 y 25 minutos, una vez que se conoce la mecánica del juego. Como digo, es parecido a echar una partida de ajedrez —no muy seria— con un colega o familiar.

Por último, y siendo una página de mitología clásica, nos queda comentar su relación con Grecia. Realmente la ambientación griega del juego es más bien algo superficial, pues obviando la influencia estética en el tablero y la caja, es bastante intrascendente. Tenemos las columnas, cierto, y unas fichas en las que se usan letras griegas… pero poco más. Que no es algo malo per se, pero obviamente a unos amantes de la cultura helena como nosotros nos sabe a poco. Eso sí, la preciosa ilustración de la caja, con una estatua de Atenea, fue más que suficiente para llamarnos la atención y conseguir que nos comprásemos el juego, que además cuenta con el aliciente de haber sido diseñado aquí en España.

 


Datos técnicos

Nombre: Tholos

Creador: David Bernal

Ilustrador: Jesús Fuentes (Chuz)

Número de jugadores: 2

Tiempo de juego: 15-25 min.

Edad: +9

Distribuidora: Perro Loko

 

Alfonso Cuesta

Madrileño de pura cepa, pero bastante helenófilo. Estudié Historia en la UAH y Arqueología del Mediterráneo en la UCM. A veces bebo ouzo y bailo el sirtaki en la playa.

Compartir
Publicado por
Alfonso Cuesta
Etiquetas: juegos

Entradas recientes

El asno parlante

Cuando Dioniso, enloquecido por Hera, vagaba por el mundo buscando una cura para su estado…

18 horas

Hestia y Príapo

Hestia era la diosa del hogar. Tanto el de los mortales como el de los…

7 días

La cólera

Tras el éxito que tuvieron Javier Olivares y Santiago García con el premiado Las meninas…

1 mes

La muerte de Cástor y Pólux

Cástor y Pólux eran los mellizos conocidos como Dioscuros. Mientras que Cástor era hijo de…

4 meses

Cástor y Pólux, los Dioscuros

Cástor y Pólux, conocidos como los Dioscuros, eran los mellizos hijos de Leda, reina de…

4 meses

Reseña de «La caricia de la oscuridad», de Scarlett St. Clair

Sinopsis Perséfone es la diosa de la primavera, hija de Deméter. Sin embargo, no es…

6 meses