Cécrope

Cécrope I fue el primer rey mítico de Atenas. Considerado autóctono, es decir surgido de la tierra misma (y por tanto hijo en solitario de Gaia), Cécrope era un híbrido de humano y serpiente.

Heredó el reino de Ática al casarse con Aglauro (o Agraulo), hija de Acteo. Con ella tuvo a Erisictón y a las tres hermanas Aglauro, Herse y Pándroso. Durante su reinado, Ática empezó a conocerse como Cecropia y tuvo un importante desarrollo, llegando a fundar ciudades tan importantes como Atenas.

Durante la disputa que tuvieron Poseidón y Atenea por convertirse en protectores de la ciudad, algunas fuentes* apuntan a que fue el propio Cécrope quién se decidió a otorgarle la victoria a la diosa virgen, y por lo tanto se le reconoce también como el primer instaurador del culto a Atenea al dedicarle a esta una estatua de madera.

Defensor de la monogamia, se le considera el propulsor de la institución del matrimonio. Así mismo instauró el cultivo de las viñas, el uso constructivo de la madera y la tradición de enterrar a los muertos. También fue el primero en utilizar los censos para controlar el número de habitantes de la ciudad.

Ya que su hijo varón Erisictón no le sobrevivió, a la muerte de Cécrope heredó el Ática Erictonio, quien también surgido de Gaia fue criado por las hijas de este. Tanto Erictonio (a veces llamado también Erecteo) como el propio Cécrope, en calidad de primeros reyes de Atenas, tienen un templo dedicado en la Acrópolis ateniense que aún se conserva en la actualidad: el famoso Erecteion. Allí, junto al pórtico de las cariátides, se cuenta que se encontraba el cecropio, la tumba del rey Cécrope I. La palabra «cecropio» es, además, sinónimo de «ateniense».

Episodios en los que interviene:

La disputa por Atenas