El juramento de Dioniso a Polimno

Dioniso fue uno de los pocos que consiguió descender al Hades y regresar con vida. Fue en busca de su madre, Sémele, y para ello acudió a la entrada de la laguna Alcionia. Era muy profunda y, pese a que sus aguas se veían tranquilas, se decía que todo el que intentaba cruzarla a nado era arrastrado hasta el fondo.

Para encontrar la forma de descender contó con la ayuda de un pastor de la zona, Polimno (o Prosimno). Éste, prendado de su belleza, le pidió una recompensa a cambio: mantener relaciones sexuales con él. A Dioniso también le parecía atractivo el pastor, por lo que aceptó. Pero esto tendría que ser para cuando regresara, así que le juró que cumpliría su palabra y se fue rumbo al Hades.

La misión de Dioniso tuvo éxito y, compartiendo su inmortalidad con ella, la llevó consigo al Olimpo y cambió su nombre a Tíone. Pero aun tenía pendiente cumplir la promesa que le había hecho a Polimno. Sin embargo, cuando regresó, éste había muerto.

Pero había hecho un juramento y debía cumplirlo. Cortó una rama de higuera con forma fálica, la clavó sobre la tumba de Polimno e hizo el amor con ella.

Aclaración sobre el mito

Si bien esta versión es la más conocida, queremos matizar que es tardía y sesgada. El primero que lo narra de esta manera, añadiendo el acto sexual, fue Clemente de Alejandría[1]. Nació en Atenas en el siglo II d. C., probablemente en una familia pagana, y conocía muy bien la religión, filosofía y cultura griega.

Se convirtió al cristianismo y fue muy detractor del paganismo. Este mito aparece en su obra Protréptico, cuyo objetivo era animar a los griegos a abrazar su doctrina. Para ello, ataca la religión griega a través de sus mitos, ridiculizando las figuras de los dioses. Este mito sobre Dioniso comienza de esta manera:

«Sin embargo, ya son una vergüenza mundial los certámenes y los falos, que se realizan en honor de Dioniso, porque se han extendido de mala manera a toda la vida.»

Citando a Heráclito, termina diciendo que, de no hacerse estas celebraciones, «se realizarían hechos aún más vergonzosos».

Antes de esta versión, la mención a Polimno solo aparece en Pausanias[2] (s.II d. C.), que simplemente menciona que le enseñó el camino. E Higino[3] (s. I a. C.) sí dice que Polimno le pide a Dioniso una recompensa «cuando vio que este joven sobresalía por encima del resto por su extraordinaria belleza corporal», pero no cuál ni habla de actos sexuales post mortem con ramas.

Así pues, en este mito hay que tener presente que la versión más popular también es la más tardía y creada con una intencionalidad manifiesta.

Notas

[1] Clemente de Alejandría: Protréptico II, 34, 3-5
[2] Pausanias: Descripción de Grecia II, 37, 5-6
[3] Higino: Astronomía poética, II,5